El grupo étnico de los cañaris tuvo su asentamiento en la hoya de Cañar, al sur del nudo de Azuay (Ecuador). Su centro más importante fue la ciudad de Tomebamba, ciudad organizada por los incas en su política expansiva, imitando fielmente el modelo urbanístico del Cuzco, aunque sin duda la ocupación inca se hizo sobre un asentamiento cañar muy anterior. Ingapirca fue otro de los sitios importantes de esta cultura, aunque este desde un punto de vista religioso.
Antes de la llegada de los incas, a los que opusieron una férrea resistencia, habían alcanzado un alto grado de desarrollo social y político, organizados en cacicazgos. Sus poblados estaban organizados en cabañas hechas en madera que se disponían alrededor de la vivienda del cacique.
Respecto a la cerámica
cañar se han distinguido tres tipos: - Rojo sobre ante, con platos profundos
de diversos tamaños, ollas globulares, vasijas trípodes en “hojas
de cabuya”;- el tipo inciso, con cerámica con decoración
incisa e impresa sobre todo en ollas globulares de distintos tamaños
y tonos rojos y cremas;- el tipo fino con gran variedad de formas y decoraciones
que parecen estar destinadas a ceremonias religiosas o rituales. Encontramos
vasos acampanados cilíndricos y tritónicos, ollas globulares,
compoteras, botellas, vasos timbales con rostro humano modelado en la parte
alta. Los motivos decorativos suelen ser geométricos con cruces, espirales,
flores...