Se cree que los mapuche tejían con lana sobre telares antes de la llegada de los españoles, utilizando para ello lana de camélidos, en particular, guanacos y llamas. Estas consideraciones se basan en los hallazgos de fragmentos textiles en algunos sitios arqueológicos, como el de Alboyanco (cercanías de Angol, Chile) datados cerca del año 1350. De acuerdo a Klein, este arte se habría adquirido de las tribus atacameñas y diaguitas del norte. Además, especifica que
"la influencia Inca causó la diseminación general y el mejoramiento de estas técnicas. Es casi seguro que los araucanos contemporáneos con los españoles de la conquista usaban ropa de lana basta cuyo corte y apariencia le debían mucho a los modelos peruanos. (Klein, 1961/6:7) "
De acuerdo a varios autores, los primeros textiles producidos eran, en efecto, muy sencillos, sin mucha decoración, poniendo más esmero en los ropajes utilizados para ritos y ceremonias. Esta simplicidad cambia con la llegada de los españoles y la adopción de la oveja como animal de esquila (ver imagen).Cabría aquí hacer una reflexión: el enriquecimiento de los textiles mapuches, en términos de símbolos y colorido, puede perfectamente haber correspondido a un deseo de auto identificación frente a quien se le presentara como un opuesto. Incluso más, al advertir el interés que los mismos presentaban para los españoles, el lenguaje simbólico pudo adquirir mayor complejidad y riqueza, distinguiendo así las prendas "reales" o "con significado" de las utilizadas para el trueque. Es así que las prendas son muy requeridas por sus características de resistencia y durabilidad (ver imagen). Los cronistas de la época elogian la calidad y colorido de los mismos (ver imagen) , tal como dice Ambrosseti (1893)
"en general, las indias son muy tejedoras, y entre ellas hay algunas que descuellan por lo admirable de sus trabajos; he visto algunos ponchos de lana de guanaco tan bien tejidos, que parecen hechos a máquina.(Espósito, 2004: 81). "
Es decir, tenemos aquí un arte que está hecho, en principio, específicamente para significar. Pero, también podríamos pensar en un doble objetivo, ya que advertimos desde un principio el enfoque comercial, y muy específicamente, con el blanco, que probablemente llevó a hacer más llamativas las prendas. Tal vez los diseños ya existían y se colorearon para hacer más vistosas y atractivas las prendas."Los mapuches comerciaban con otros indígenas desde antes de la llegada de los españoles. Testimonios de algunos conquistadores expresaban haber encontrado, por ejemplo, aborígenes en la zona de Buenos Aires vistiendo ropa de lana tejida, que traían desde la cordillera. Pero con el establecimiento de los blancos en territorio americano, el comercio entre tribus también aumentó. Los araucanos chilenos vendían sus tejidos, sobre todo ponchos, a los aborígenes del otro lado de la cordillera a cambio de caballos. Luego, los ponchos eran cambiados, a su vez, por mercaderías españolas, como yerba, dulces, sombreros, cuchillos y aguardiente. Los pampas solían llevar los tejidos araucanos juntos con productos propios a las pulperías para que fueran vendidos, o incluso montaban tiendas en las afueras de Buenos Aires. (Espósito, 2004: 81). "
No creo que el comercio que se daba en forma tan abundante no afectara de manera radical lo que se producía. Puedo creer, eso sí, que existían dos artes bien diferenciados, uno para "afuera" y otro para "adentro", que existía desde tiempos antiguos y que marcaba claramente lo propio de lo foráneo. La pregunta queda abierta, porque no es mi objetivo responderla aquí (y no podría tampoco).En el presente trabajo, intentaremos adentrarnos en el significado y sentido estético que se encuentra en los textiles mapuche, que
"aluden a un modo de expresión propio y a la existencia de un "lenguaje" a través del cual se establece un diálogo entre sus creadoras y los miembros de su sociedad. (Wilson, 1992). "
Numerosas historias podían contarse a través de los dibujos, así como también importantes datos de la posición social y económica de los hombres y mujeres. Los tejidos podían realizarse para alguien en particular o para una situación específica (siguiendo a Angélica Wilson).El significado de todo ello pertenece a la cultura mapuche, que es quien comparte la simbología. Fuera, los símbolos y lo que se encuentra detrás del producto textil acabado, carecen de sentido.
Son las mujeres las encargadas de dar forma al mundo simbólico mental que se encuentra en la mente mapuche. Ellas son las especialistas, quienes comienzan aprendiendo desde pequeñas mirando a sus madres y abuelas. En general, todas las mujeres tejen, pero no todas comprenden el significado que contienen las prendas. Aunque las formas se puedan copiar, porque se elaboran en público y se exhiben, ver imagen el significado está restringido a aquellas virtuosas entrenadas especialmente para ellos.
"Una gran tejedora, duwekafe, adopta a una alumna, le enseña de todo y, después, al final de su proceso de aprendizaje general, le enseña a tejer. Por último, le enseña a expresarse debidamente en su telar. Para tejer bien se requiere de una gran memoria. El textil en su totalidad debe ser pensado, akiduam , en un plano técnico y simbólico, con anterioridad a su realización (Mege, 1990: 9). "
ver imagen. Aprender todo lo referente a la textilería, el hilado, tejido y teñido, es fundamental para que las mujeres mapuche alcancen su condición completa como tales. Es un atributo femenino muy importante, por lo que la familia se preocupa para que la niña aprenda correctamente. Muchas veces, serán los sueños quienes les comuniquen los diseños que luego volcarán en los textiles.El origen de la habilidad de las mujeres en este arte es relatado oralmente, y muestra la vinculación con lo sagrado y religioso, como cuenta Chao Ngechen.
El arte del tejido comienza con la manipulación de la lana, dándole su primer nivel de significación. (ver imagen). En primer lugar, la lana sería trabajada por la mujer por pertenecer al mismo mundo de lo suave y frágil. Una vez hilada, la lana se transforma en un elemento cultural, adquiriendo características humanas. De ello, resultan dos tipos distintos, las lanas femeninas (domokal) más delgada, y la masculina (wentrukal) más gruesa.
"La lana mujer requiere de más trabajo, pero resiste menos; es más frágil, pero permite posteriores sutilezas de expresión en los textiles: "sutilezas de mujer". La lana-hombre necesita menos trabajo en su confección, dura más, es más sólida y resistente, pero permite menos sutileza en la expresión. Esta última es la lana diaria, para objetos cotidianos, hechos para resistir golpes (Mege, 1990: 13-14)"
En cuanto a los diseños que encontramos en los textiles, éstos se encuentran determinados por los materiales, las prendas que se llevan a cabo, el telar, las características del textil y las distintas técnicas del teñido de la lana. Así, los dibujos-símbolos que encontremos en ellos tendrán dos características principales:
"1) Los diseños textiles mapuches privilegian las líneas rectas, dibujos de formas rectilíneas y angulares y colores planos. ƒste es el primer dato visual fácilmente comprobable. (Riquelme, 1994: 169-170)."
"2) Por las razones anteriores de adecuación del dibujo al telar, la mayoría de los diseños textiles son semiabstractos o abstractos. Como además de esto, un alto porcentaje de los diseños se halla relacionado con algún acontecimiento, objeto o ser natural humano o sobrenatural, cuya imagen se desea representar y/o significar, el problema clásico que se presenta en estos casos es en qué medida el diseño se corresponde (o "guarda fidelidad") con el objeto que desea representar, lo que ayuda a comprender hasta donde se puede confiar en las representaciones icónicas para el conocimiento de la realidad. (Riquelme, 1994: 169/170)."
Las imágenes que finalmente aparecen plasmadas en los textiles resultan de convenciones culturales, dibujos que se encuentran en la mente de las tejedoras porque forman parte de una tradición textil. Así, no están reflejando objetos de la realidad, sino que todo está en la mente de las tejedoras, que para ello aprenden durante años. De acuerdo a Gladys Riquelme, que venimos siguiendo en este aspecto, prueba de ello sería la repetición de diseños en distintas épocas y lugares (ver imagen).
Otra cuestión importante que se señala es que en general no se sabe el por qué de la elección de ciertos motivos, buscando su explicación a través de la tradición oral (ver imagen). Con el uso de estas fuentes, lo que se pretende es
"reforzar la identidad étnicocultural, mediante la reactualización de imágenes y sentidos primordiales (Riquelme, 1994: 172). "
Todas las prendas significan algo, aunque algunas de ellas encierren significados más profundos. Son los casos de los traruwe femeninos, los ponchos masculinos de diario y los ceremoniales.
La prenda básica mapuche era el chamal, prenda sin color, neutra, que será luego teñida para marcar sexo y edad. Al teñirlo de negro se convertirá en un kepam , de uso exclusivo femenino adulto. Si queda sin color, será de los niños. Para convertirlo en el chiripa masculino se le agregarán líneas marrones o negras, para no dejarlo como el de los niños.
Como dijimos, el kepam será un chamal teñido de negro. Esta es una prenda bastante especial, ya que sólo puede ser negra. Cubre todo el cuerpo, en forma tubular, dejando para las solteras ambos hombros descubiertos y para las casadas sólo el hombro izquierdo. Representa un gran esfuerzo técnico, ya que es la única prenda teñida después de tejida:
"Con su prenda básica, la mujer hace un sutil juego de significación. Primero establece que éste es sólo color (teñido después de tejido); elige el color negro y luego lo hace resplandecer en azul, gracias a lo delicado de su lana y a la perfección del tejido, además de la infiltración de tinturas azules. Entonces su Kepam es negro, el color de la ropa "real", acompañado de tonalidades en azul, el color de la "realización alegre" de los dioses (Mege, 1990: 25). "
Por otra parte, en cuanto a vestimenta femenina, nos encontramos con la kŸlla , manta de mujer, que cubre de negro con estridencias, definidas por su borde de color y propias de la mujer adulta. Tres colores posibles para el borde: azul, púrpura (color de machi) y verde.
Existen al menos cuatro interpretaciones en el significado del ñimin (código del diseño) del traruwe , la faja femenina a que ya aludimos. Tengamos en cuenta que decodificar el ñimin es penetrar en los significados ocultos y privados de la cultura mapuche.
De acuerdo a la primera interpretación en lo expuesto por Sonia Montecino (quien a su vez lo toma de Gladis Riquelme), sería la versión de Américo Gordon, para quien el traruwe representaría la lucha de Tren Tren y Kai Kai , el relato mítico del diluvio. Para ello, se basa en cinco tipos de figuras, aunque sólo una es visible: la figura antropomorfa, pues el resto queda escondido entre los pliegues de la faja, tal vez para ser conocidos sólo en la intimidad del hogar. Los demás componentes serían las dos serpientes luchando, hombres transformados en sirenas y el nacimiento de una nueva generación humana.
Para Cabeza, y continuando un poco lo anterior, serían dos figuras zoomorfas que representarían a Tren Tren y Kai Kai , formando los opuestos complementarios tan conocidos por todos: bien/mal, tierra/agua. También, distingue dentro de los diseños la imagen de un orante arrodillado:
"Se puede interpretar (este dibujo) como un símbolo antropomorfo en oración. Ahora, si consideramos la función del o la machi que viene a ser el intermediario entre Dios y los hombres, como la función le exige una actitud de constante oración para mantener el lazo, la ligazón....podemos interpretar esta figura formal como el ser que se desprende del cuerpo para asociarse más pura e íntimamente con el símbolo del rewe que lleva a la esfera divina. El alma estaría siendo simbolizada por la "cabeza florida" separada de sus dos extremidades (Montecino, 1995). "
De esta forma, el traruwe sería un "tributo a la fertilidad", pues las serpientes quedan cerca del vientre femenino cuando se ciñen la faja.
De acuerdo a Frank Bélec, la principal figura sería la de un sapito estilizado y esquemático con
"una protuberancia [que] recuerda el órgano sexual masculino. En algunos trariwe esta parte se junta con la parte céntrica del cuerpo del dibujo siguiente, sugiriendo una copulación [De esta manera] El trariwe que usan las mujeres mapuche en la cintura tiene funciones mágicas: expresa el anhelo que los espíritus dadores y protectores de la vida amparen el receptáculo femenino donde ella se gesta". Por último en esta lectura el "sapito" del cinturón "...puesto en el vientre de la mujer, significa y simboliza adecuadamente las fuerzas sobrenaturales que vigilan el surgimiento de la vida desde este lugar escondido y acuoso. (Montecino, 1995). "
Siguiendo a Pedro Mege, el traruwe presenta tres funciones bien diferenciadas: práctica, estética y semiótica. Las figuras que aparecen en los textiles se constituyen por una serie de procesos de corte, desdoblamiento y desmembramiento, lo que origina transformaciones en los diseños y gracias a lo cual pueden ser plasmados geométricamente en las telas (ver imagen). En el caso de los traruwe , la figura principal sería Lukutel el arrodillado, un orante (hombre o mujer) rogando durante el Nguillatun. Esta figura está constituida por
"Longo ,cabeza; Wisiwel ,cuerpo; Piuke , corazón y Puñontrewa las huellas que deja un perro al pisar una superficie blanda, son sus manos y pies (Mege, 1990). "
Esta figura se transforma al pasar por diferentes procesos, constituyendo un árbol, el Temu , y una flor, Rayen . El Temu tiene características mágicas, asociadas a las aguas cercanas, que pueden dar una vida saludable a los recién nacidos. Rayen , en cambio"simboliza en la mujer la posibilidad de ser fecundada; de una fecundidad, diríamos en Occidente, bella (Mege, 1990). "
Para Sonia Montecino, a pesar de la cantidad de significaciones existente, cada uno de ellos es válido en el imaginario mapuche.
"Desde nuestra mirada nos interesa poner en escena dos elementos: el primero, está vinculado al hecho de que son las mujeres mapuche las que van tejiendo (real y metafóricamente) esos sentidos, esos símbolos, creando y recreando un "habla" plena de alegorías. En segundo lugar, como lo hemos dicho, el trariwe es de uso femenino exclusivamente. Las mujeres mapuche portan, entonces, en su propio cuerpo los discursos míticos que dan identidad a su pueblo, que lo singularizan. Y, al mismo tiempo, desde su cuerpo elaboran y reproducen esos relatos (vía el oficio de tejedora). Podríamos leer en esto que lo femenino es soporte y germinación de la narración que explica el re-surgimiento de la humanidad. Pero, también puede interpretarse como el anhelo social de que ese cuerpo, que es puramente naturaleza, sea "escrito" por la cultura. Lo femenino cambiante, cíclico como los elementos naturales, es "contenido" por un cinturón cargado de símbolos religiosos, fundacionales, de vida. Apresado en ese relato, el cuerpo de la mujer mapuche es cultura y naturaleza al mismo tiempo. Y, metafóricamente, el propio cinturón es el nexo que ella tiene con el cosmos: una relación "umbilical" que va envolviendo al ser (real y figurado) que nacerá desde su vientre. (Montecino, 1995). "
A través de estas versiones, tenemos como elementos comunes el relato mítico o asociado de alguna manera a lo religioso, la fertilidad y fecundidad que de ello se derivan y la mujer que, como portadora de esos símbolos, se transforma en un ente esencialmente reproductor tanto de vida como de cultura. Podría pensarse también que en un mundo donde la mujer es omnipresente (y por tanto, un poco invisible) el traruwe la marca, la identifica como ser, como portadora y como transformadora.
Por último, conozcamos la opinión del filósofo mapuche Aukanaw :
" Las culturas indígenas americanas las fajas representan siempre una serpiente, que ciñe el talle del portador. Por tal razón, estos objetos ostentan casi siempre guardas ofídicas. (...) La serpiente de los traruwe puede ser una bicéfala, o dos entrelazadas. Cuando son dos, presenta cada una de ellas un color y valencia distintos. En muchos casos el ofidio, en distintos tramos de su longitud, muestra una 'mano' o 'pata'. Estas manos son semejantes a las del personaje 'antropomorfo' también presente en el traruwe . Es bien sabido que las 'manos', o 'pies', de estas serpientes representan 'alas'. (Lukutel ) sería la representación simbólica de) la divinidad manifestada como individuo, se ve aparecer su cintura ceñida por una o dos serpientes, colgando las cabezas de ellas a ambos lados del personaje. Toda expresión 'artística' de los aborígenes es algo sagrado, es una representación gráfica de lo que se puede percibir en otros órdenes de la Realidad, de ningún modo es fruto de la imaginación o de la 'creatividad'. Es un retrato realista, pero estilizado, de algo objetivo. (Espósito, 2004: 105/106). "
En todo caso, y como vemos hasta aquí, lo que se encierra detrás de las representaciones son significados trascendentes que nos hablan del lugar en el mundo que ocupan las comunidades mapuche. Podríamos también aludir a una "profunda relación existente entre los diseños y el mundo cosmogónico de ésos pueblos" (de acuerdo a Mary Torres) siguiendo a esta autora, quien ha relacionado los dibujos de los textiles con los encontrados en el arte rupestre patagónico, que corresponden a laberintos, clepsidras, rombos y triángulos entrelazados, característicos de la labor mapuche (ver imagen).
"Es así como de pronto, nos sentimos partícipes de toda una cultura, al comprender que al tejer esos dibujos geométricos , estamos representando figuras humanas entrelazadas que se utilizan en los tatuajes genealógicos practicados en las ceremonias de la imposición del nombre, donde ésas figuras antropomórficas estilizadas y esquematizadas hasta la geometrización, simbolizaban a los antepasados de un individuo y con ellos su linaje. También encontramos en el trazado de las grecas, una preparación para el viaje que deberían realizar después de la muerte hacia el mundo de los espíritus ancestrales, ya que esos dibujos laberínticos representan el camino que deberán recorrer y que sólo sortearán exitosamente si lo conocen en su totalidad con antelación (Torres, 1987:49). "
Pasemos ahora al mundo masculino. El significado de los Makuñ , mantas masculinas, ha sido trabajado por Pedro Mege y a él seguiremos en la explicación del contenido de las mantas (ver imagen).
Las mantas son mensajes de la mujer al hombre y son, por ello, intransferibles. Hay de dos tipos, de uso diario y ceremoniales. Las mantas tienen tres unidades básicas:
Campo (Tue ) es toda la superficie de la manta. Puede asumir dos colores: negro y rojo.
"El negro es un color reservado principalmente para los nobles, ulmen ; a diferencia del rojo, que se asocia a la sangre y hace referencia al poder del hombre que porta la prenda. Poder que viene de la sangre en sí, pues es un signo de vitalidad, de energía vital. Los hombres que se cubren con estos ponchos son capaces además de producir la emanación de la sangre de sus enemigos; adquieren para ellos lo que es vital para otros. Un kelumakuñ , manta roja, es un 'símbolo fuerte', que obliga al que lo utiliza a ser un 'hombre de sangre (Mege, 1990: 40). "
En las columnas de representación, por su parte
" se hace mención en ellas a si su dueño tiene varias mujeres, si posee caballos, araucarias, tierra cultivable, hermanos poderosos, etc. Además de explicitar su condición socioeconómica, aclara la procedencia ecológica del sujeto: si es costino, del valle, de la precordillera o trasandino (Mege, 1990: 40). "
La última de las unidades de la manta es el borde, que pueden ser como flecos que se desprenden de la urdimbre o como terminación doblando el borde la manta. Los flecos nos permiten apreciar la calidad del textil (hilado y torsión).
Coña, Pascual. Testimonio de un Cacique Mapuche.
Espósito, María. (2004. )Arte Mapuche. Ed. Guadal, Buenos Aires.
Klein, O. (1961/6. )Textile Arts of the Araucanians.
Mege Rosso, Pedro. (1990. )Arte Textil Mapuche. Ministerio de Educación, Museo Chileno de Arte Precolombino, Santiago de Chile.
Montecino, Sonia. (1995. )Sol Viejo, Sol Vieja. Lo femenino en las representaciones mapuche. Ed. CEDEM y SERNAM, Santiago de Chile. http://rehue.csociales.uchile.cl/rehuehome/facultad/publicaciones/Excerpta/excerpta7/solsimbo.htm
Riquelme, Gladis. (1994. )"Tradición Oral y Creatividad Plástica en Textiles Mapuches. "Comprensión del Pensamiento Indígena a través de sus expresiones verbales. Kuramochi, Yosuke (coord.). Ed. Abya-Yala, Quito.
Torres, Mary (1987. )Telar Mapuche... "con los pies sobre la tierra..." Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, Cuadernos de Extensión Universitaria, Serie Arte y Cultura, 1.
Wilson, Angélica. (2002. )Textilería Mapuche. Arte de Mujeres. Ediciones CEDEM, Colección Artes y Oficios, 3, Santiago de Chile. www.serindigena.cl