En la cerámica Tonosí surgen por primera vez representaciones humanas como tema figurativo. Éstas suelen aparecer como elemento central o en grupos. Las figuras antropomorfas que se disponen como elemento central, aparecen de frente, son muy esquematizas y suelen presentar las piernas y brazos abiertos y flexionados (fig.22 a-c). La tendencia a las líneas rectas, a los ángulos y la falta de detalles , da como resultado unos diseños muy esquematizados característicos del Cerámico Medio. El segundo grupo de representaciones humanas lo componen siluetas simples pintadas en negro y que aparecen en grupo formando escenas de fiestas, labranza, danzas...(fig.22 d) (Ichon 1980;Cooke 1985). Las figuras adquieren, al contrario del estatismo de los casos anteriores, una gran diversidad de posturas, frontales, de perfil, de perfil flexionadas? y hay una impresión general de actividad. Es la primera y única vez que aparecen escenas compuestas por figuras antropomorfas en la cerámica panameña. En la cerámica estilo Cubitá se retoma de nuevo el tema de la figura humana siguiendo el primer modelo. Éstas son frontales y se componen de líneas rectas mientras que las piernas y brazos aparecen flexionados (fig. 22 e). Se distinguen de las anteriores porque el trazado en negro es más grueso, y presentan componentes de relleno característicos del estilo Cubitá, como son los diseños de "reloj de arena" compuestos por triángulos unidos por el vértice, lo que le da en general un efecto más elaborado que en el estilo Tonosí, aunque sigue la tendencia a la geometricidad y angulosidad. En esta evolución hacia la complejidad del diseño, encontramos en las representaciones humanas del estilo Conte figuras que presentan cierta movilidad, por lo que las hemos llamado "danzantes" . Éstas se presentan frontales, pero se diversifican las posturas de brazos y piernas, que es lo que le infunde el dinamismo. El diseño se enriquece con la introducción por una parte de adornos como pulseras para los pies y manos (fig. 22 h-j), y "tocados" como garras de saurios (fig. 22 g-k), cornamentas de venado (fig.22 j)o las guirnaldas en base a bandas con puntos colgantes -tiara de plumas esquematizadas- (fig.22 f-g) que podríamos entender como tocados que pudieron haber sido utilizados en ceremonias-bailes o rituales. Con el estilo Conte se inicia la ocultación tras estos "tocados" de la figura humana que terminará en una transformación total hacia los saurios típicos del estilo Macaracas que como dijimos presentan características humanoides (fig. 18 g.). Un elemento innovador en estas figuras es la aparición de un motivo que indica en la mayoría de los casos el sexo femenino (fig.22 g-k) . |
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Con el estilo Parita volvemos de nuevo a encontrarnos con diseños antropomorfos, esta vez modelados al aparecer como apéndices-refuerzos en algunas ollas y que han sido descritos como "atlantes humanos" (fig. 22 l) al presentarse en actitud de soporte de bordes inclinados hacia el exterior de algunas vasijas de cuello alto(Cooke 1985). Con este estilo se inicia una nueva etapa de esquematización y rigidez del diseño que culmina en el estilo El Hatillo, con representaciones pictórica donde la figura humana, al igual que vimos en los saurios, se somete a marcos geométricos de formas triangulares, rectangulares?.(fig. 22 m-p). |
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